El auge de la inteligencia artificial en los últimos años ha generado una revolución en el mercado laboral, sorprendiendo incluso a las empresas que la desarrollan. Un estudio reciente revela que cerca del 47% de las organizaciones involucradas en proyectos de inteligencia artificial se encuentran con la difícil tarea de encontrar profesionales capacitados que puedan manejar esta tecnología. Esta escasez de talento está creando un desajuste considerable, dado que muchas empresas ya han comenzado a implementar sistemas de inteligencia artificial en sus operaciones. Según datos del Banco de España, aproximadamente el 20% de las empresas españolas encuestadas utilizan IA, cifra que se eleva hasta el 44% en las grandes empresas con más de 250 empleados, según el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI).
El desfase entre la rápida adopción de la inteligencia artificial y la disponibilidad de profesionales preparados para sacarle provecho es evidente. Conscientes de esta realidad, muchas empresas están comenzando a invertir en la formación de su personal. Un informe de Adecco, titulado ‘Impulsando el talento en las pymes españolas: desafíos y oportunidades’, indica que más de la mitad de las pequeñas y medianas empresas (pymes) están capacitando a sus trabajadores en esta área o están en el proceso de explorarlo. En concreto, el 26,5% de las pymes ya cuentan con programas de capacitación activa en inteligencia artificial, mientras que casi el 46% ha optado por desarrollar habilidades internas antes que buscar nuevos talentos en el mercado.
La inversión en formación parece ser una estrategia clave para que las pymes no queden rezagadas en esta transformación tecnológica. Juan Francisco Rodríguez, director comercial de Adecco Staffing, subraya que «las empresas que se enfoquen en capacitar intensamente a sus trabajadores y asegurar su reciclaje serán las más exitosas en esta nueva era». Sin embargo, el estudio también revela que un 27,7% de las pymes no cuentan con los recursos necesarios para afrontar este reto, lo que sugiere la importancia de proporcionar apoyo, tanto financiero como logístico, para facilitar esta transición.
Los datos también muestran que la inteligencia artificial ya está generando resultados tangibles en las empresas. Aproximadamente el 36,3% de las compañías afirman que está optimizando sus procesos y el 33% que está mejorando su productividad. Esto plantea expectativas variadas en cuanto al futuro del empleo; más de la mitad de los encuestados creen que su mercado laboral se mantendrá estable, mientras que el 33,4% prevé una creciente demanda de nuevos perfiles laborales. Solo un 12,5% anticipa despidos debido a la automatización, sugiriendo una transición a un modelo laboral más tecnológico que podría, en lugar de excluir, reconfigurar el empleo actual.
La respuesta a esta evolución varía significativamente entre empresas de diferentes tamaños. Las medianas y grandes empresas han sido las que más han avanzado en la implementación de la automatización y la formación digital. Este panorama indica que, aunque la inteligencia artificial plantea desafíos, también abre oportunidades para redefinir roles y mejorar la competencia laboral. A medida que más empresas se embarquen en esta transformación, será esencial continuar el esfuerzo en la capacitación y la recualificación, asegurando que tanto los empleados como las organizaciones estén preparados para el futuro del trabajo.



















