El proyecto de TransMiCable San Cristóbal avanza a paso firme, marcando un hito significativo en la obra de movilidad sostenible diseñada para beneficiar a más de 400.000 habitantes del suroriente de Bogotá. La llegada de las primeras 48 cabinas, procedentes de Alemania, subraya el compromiso del alcalde Carlos Fernando Galán y su administración con la mejora del sistema de transporte público en la ciudad. Durante una reciente visita a las obras, el mandatario distrital estuvo acompañado por el director del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), Orlando Molano, y el secretario de Seguridad, César Restrepo, quienes constataron los avances en el desarrollo del proyecto.
El alcalde Galán no perdió la oportunidad de inspeccionar las cabinas, que fueron transportadas desde el puerto de Hamburgo, y se subió en una de ellas, simbolizando la conexión directa entre la administración y la comunidad beneficiada. Al referirse a la transformación del proyecto, el alcalde destacó que, al asumir su cargo, la obra estaba apenas en un 0 por ciento de avance, mientras que actualmente se encuentra en un 63 por ciento, evidenciando el esfuerzo y gestión realizada por su equipo. Este sistema no solo promete mejorar la movilidad, sino también generar un impacto positivo en la calidad de vida de miles de ciudadanos.
El TransMiCable de San Cristóbal tendrá una extensión de 2.8 kilómetros y contará con un total de 148 cabinas, de las cuales cuatro serán de reserva, cada una con capacidad para transportar hasta 10 personas. Esta línea aérea conectará el Portal 20 de Julio del sistema TransMilenio con las estaciones La Victoria y Altamira, donde se ubicará un parqueadero para las cabinas. La implementación de este innovador sistema de transporte está diseñado para movilizar hasta 34.000 personas diariamente, con un flujo estimado de 4.000 usuarios por hora en cada dirección, lo que mejorará significativamente la conectividad en la zona.
Uno de los objetivos principales del proyecto es la reducción del tiempo de viaje en un 72 por ciento, disminuyendo los trayectos de 35 a apenas 10 minutos. Esta mejora en la eficiencia del transporte público se estima que será crucial para aliviar la congestión en las vías de San Cristóbal y dotar a sus habitantes de un medio de transporte más rápido y accesible. Según el IDU, la estación Altamira ha mostrado un avance superior al 56 por ciento, y ya se han instalado nueve de las 21 torres planificadas para el sistema, destacando la buena marcha de la construcción.
Con la construcción iniciada en diciembre de 2023 y la entrega final del sistema proyectada para finales de 2026, se espera que la llegada progresiva del resto de las cabinas ocurra entre abril y mayo de 2025. La culminación de esta obra no solo representa un avance en infraestructura, sino también un paso importante hacia un modelo de transporte más sostenible y eficiente. El TransMiCable promete ser una solución tangible a las necesidades de movilidad de Bogotá y un ejemplo a seguir en otras localidades que enfrentan desafíos similares en sus sistemas de transporte.