En un anuncio significativo para el transporte público de Bogotá, el alcalde Carlos Fernando Galán ha confirmado que el sistema TransMilenio incorporará un nuevo grupo de 101 autobuses eléctricos en el primer semestre de 2026. Entre estos vehículos destacan los 25 primeros autobuses articulados-duales eléctricos del mundo, lo que representa un hito en la evolución del sistema de transporte urbano. Esta renovación es parte de los compromisos asumidos por los concesionarios de la Fase III del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) para reemplazar los autobuses que han alcanzado el final de su vida útil y adaptarse a las nuevas exigencias operativas de la ciudad.
La modernización de la flota es liderada por TRANSMILENIO S.A. y busca cumplir con altos estándares de operación, al mismo tiempo que se avanza hacia un sistema más sostenible mediante la implementación de tecnologías limpias. Dentro del nuevo contingente, se incluyen 25 autobuses articulados-duales, 68 busetones y 8 padrones, sumando así un total de 1.486 autobuses eléctricos que ya circulan en la ciudad. Este proyecto no solo es un paso adelante en la transición hacia un transporte más ecológico, sino que también contribuye a mejorar la calidad del aire en la capital colombiana.
Los autobuses articulados-duales eléctricos se destacan por su capacidad de operar de manera versátil, ya que pueden funcionar tanto en los carriles exclusivos del sistema troncal como en los carriles mixtos de la malla vial urbana. Esta característica les permitirá adaptarse a la implementación gradual de nuevas troncales, como las que se proyectan en la Avenida Ciudad de Cali y la Avenida Carrera 68. Con esta flota, Bogotá podrá aprovechar inmediatamente los tramos completados, mejorando la cobertura del servicio y optimizando los tiempos de operación, incluso antes de la finalización total de las nuevas troncales.
La nueva flota de autobuses también contará con un diseño que prioriza la accesibilidad y la seguridad de todos los usuarios. Entre las innovaciones se incluyen espacios para sillas de ruedas y coches de bebé, áreas para animales de asistencia, sillas prioritarias para personas con discapacidad y adultos mayores, así como cámaras de seguridad y puertos USB para la carga de dispositivos móviles. Estas mejoras son parte de un conjunto de Sistemas Inteligentes de Transporte (ITS) que se están implementando para ofrecer una experiencia de viaje más eficiente y segura, beneficiando a un amplio espectro de usuarios.
Además de las mejoras tecnológicas y estructurales, el acuerdo para la Fase III del SITP incluye un enfoque importante en la inclusión laboral. Se ha establecido que al menos el 10 por ciento del personal de conducción estará a cargo de mujeres al final de la concesión, lo que implicará la incorporación de, al menos, 300 mujeres conductoras en esta fase del sistema. La Fase III del SITP, que comenzó en 2012, representa un paso crucial en la modernización del transporte público de la ciudad y se enmarca en los esfuerzos por garantizar un servicio de calidad que responda a las necesidades de todos los ciudadanos.