En una reciente revelación, el magistrado de la Corte Constitucional, Vladimir Fernández Andrade, compartió detalles sobre sus interacciones con el político Ortiz, así como otros secretos que han circulado en el entorno del poder. Fernández, quien también fue secretario jurídico de la Presidencia, ha estado en el centro de varias controversias relacionadas con el Gobierno de Gustavo Petro. La situación se complica aún más con las tensiones internas dentro del gabinete, donde se destacan los conflictos entre Amelia Pérez, actual directora de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), y el ministro de Educación, Daniel Rojas. Estas disputas están alimentadas por acusaciones sobre la permanencia de antiguos colaboradores de Rojas en la SAE, lo cual ha generado descontento en la actual administración.
La denuncia enviadas por Pérez a la Fiscalía sobre posibles irregularidades en la gestión de Sebastián Caballero, quien fue su mano derecha en el ministerio de Rojas, ha intensificado la fricción. Esta denuncia se refiere a la administración de piscícolas en Huila y a un contrato de 428 millones de pesos otorgado por la SAE durante el mandato de Rojas. La situación se complica con la defensa de Caballero por parte del abogado Miguel Ángel del Río, lo que suscita la pregunta sobre quién asumirá el coste de su defensa legal ahora que Caballero ya no está en la SAE. Este conflicto refleja la lucha de poder dentro del Gobierno y cómo la política puede volverse personal.
Por otro lado, el papa Francisco ha dejado una huella significativa en Antioquia, donde su labor ha sido reconocida por ser fundamental en la canonización de la madre Laura Montoya, la primera santa colombiana. Este hito, junto con la beatificación de otros mártires como Jesús Aníbal Gómez y la madre María Berenice Duque, subraya la conexión espiritual del pontífice con la región. La influencia de Francisco no solo se limita a las canonizaciones, sino que también abarca múltiples intervenciones en favor de la paz y la reconciliación, destacando su compromiso con la justicia social en Colombia.
Las tensiones en el gabinete también se ven reflejadas en la relación entre el presidente Petro y la fiscal Camargo, especialmente en lo que se refiere al caso de su hijo, lo que podría traducirse en conflictos más amplios dentro del aparato estatal. Mientras tanto, en el entorno del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), se han estado llevando a cabo negociaciones estratégicas para la próxima Consulta Popular que pudiera resultar en complicaciones legales en el futuro. Se baraja la posibilidad de considerar las candidaturas de senadores para las regionales del ICBF en departamentos como Atlántico y Córdoba, una medida que podría asegurar control político y administrativo, aunque los rumores sobre cancelaciones de reuniones clave suscitan dudas sobre la efectividad de esta estrategia.
Finalmente, el exfiscal Gabriel Jaimes ha emitido un comunicado para aclarar su posición respecto a los audios de Laura Sarabia, en los que se menciona una reunión con el exsenador Benedetti. Aunque Jaimes confirma el encuentro, asegura que fue para discutir cuestiones de campaña y no respondió a preguntas sobre la rapidez con la que cerró la investigación relacionada con el ministro del Interior. La falta de claridad en su declaración alimenta la percepción de que hay más de lo que se muestra en el ámbito político colombiano, lo que intensifica el interés del público en seguir los desarrollos de estas complejas redes de poder.