La guerra en Ucrania ha alcanzado un punto crítico, con el entorno de Donald Trump presionando al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para que "baje el tono" y considere la posibilidad de firmar un acuerdo que comprometa sus materias primas.Esta presión se intensifica a medida que se aproxima el tercer aniversario de la invasión rusa, planteando serias cuestiones sobre la dirección futura del conflicto.