Geraldine Fernández Ruiz, una ilustradora de Barranquilla, Colombia, se vio envuelta en un torbellino mediático tras afirmar haber tenido una participación significativa en la película japonesa de animación ‘El niño y la garza’, producida por el reconocido Studio Ghibli. La artista, que pasó de ser una figura desconocida a una personalidad controvertida, admitió recientemente haber exagerado su contribución al film, desatando un debate nacional sobre la veracidad de su relato.
Fernández había declarado en diversas ocasiones, tanto en privado como en público, su trabajo en la película dirigida por el distinguido Hayao Miyazaki. En una charla en la Universidad Sergio Arboleda de Barranquilla, afirmó haber recibido un obsequio y una carta de agradecimiento de Studio Ghibli por ilustrar un gran número de fotogramas, algo que más tarde se reveló como una exageración.
La historia de Fernández ganó notoriedad después de que ‘El niño y la garza’ se alzara con el Globo de Oro a la mejor película animada. El diario El Heraldo de Barranquilla publicó un artículo destacando el supuesto logro de la ilustradora. Fernández continuó manteniendo su versión de los hechos, afirmando haber trabajado en miles de fotogramas de la película, una tarea que describió como extensa y manual.
Sin embargo, las dudas sobre la veracidad de sus afirmaciones comenzaron a surgir, especialmente cuando se reveló que su nombre no figuraba en los créditos del film. Esto llevó a una ola de críticas y memes en redes sociales, poniendo en duda su participación en la aclamada película.
En una reciente entrevista con Blu Radio, Fernández enfrentó estas críticas y admitió haber exagerado su rol en ‘El niño y la garza’, reconociendo que su contribución había sido menor y realizada en equipo. En conversaciones con El Heraldo y otros medios, expresó su arrepentimiento por la situación, señalando que su historia se hizo pública sin su consentimiento y que, de poder volver atrás, manejaría la situación de manera diferente.
La ilustradora explicó que su oportunidad de trabajar en la película surgió tras completar un máster en ilustración en la Universidad de Tokio, donde su estilo fue comparado con el de Studio Ghibli. A pesar de los recientes acontecimientos, Fernández se mantiene firme en su afirmación de haber colaborado en la película, aunque en una escala mucho menor de lo que inicialmente había declarado.