Seguramente ahora que pasas más tiempo en tu casa, te has dado cuenta de que algunas cosas no funcionan bien o, definitivamente, dejaron de funcionar por completo. Debido a que la cuarentena te obligó a estar encerrado en tu hogar, ya no hay excusas para hacerte cargo de eso que tanto te molesta: una silla coja, una puerta que clama por aceite, un estante que espera ser ordenado o tu armario con todas esas prendas que no usas hace años.
Para que tu bolsillo no se vea ─aún más─ afectado comprando nuevos reemplazos, hay varias soluciones caseras para que puedas arreglar casi todo sin la ayuda de un experto y, si lo que buscas es arreglar esas cortinas o persianas que decidieron no subir más, diste con el artículo indicado.
A continuación, encontrarás los problemas más recurrentes que presentan las cortinas y persianas, como los atascos y, las soluciones más fáciles para que puedas arreglarlas por tu cuenta y sin tener que desembolsar dinero extra.
Problemas más comunes de las cortinas y persianas
- La cortina o persiana no sube ni baja del todo al tirar la cinta: este es un clásico de clásicos. Revisa bien, ya que probablemente debe haber algún problema de instalación de la cinta. Debes fijarte en el cajón de la cortina o persiana y tirar de la cinta del recogedor hasta que llegue al tope. Preocúpate de fijarla bien. Luego de eso, debemos girar el disco del eje en sentido contrario a cómo suba la persiana, de manera que recoja toda la cinta antes sacada del recogedor. Luego de eso la fijamos y ya está listo, probablemente será mucho más fácil de lo que pensabas.
- La cortina o persiana se atascó: pueden ser muchas las razones por la cual se produjo el atasco. Debemos inspeccionar el recorrido completo de la persiana, abriendo también el cajón para ver si hay algo roto o enganchado que pasó desapercibido. Probablemente encontremos el atasco y así sólo falta reubicar el listón de la persiana que se desplazó. Con una simple y rápida revisión, puedes encontrar la causa del problema.
- Se rompió el motor de la cortina o persiana: es verdad que las persianas con motor tienen una mayor durabilidad que las persianas convencionales, sin embargo, su arreglo -en caso de alguna falla- puede ser un poco más complejo. Generalmente hay que reajustar cables y mecanismos que se han aflojado con el paso del tiempo.
Otros ajustes de cortinas y persianas
La cortina o persiana se baja sola: significa que la cinta no está sujeta, por lo que debemos retirar el recogedor de la pared o abrirlo. Debemos fijarnos que la cinta pase por una rendija del recogedor que tiene una parte pequeña que la traba. Intenta cerrar esta pestaña o arreglarla, de manera que quede casi pegada a donde pasa la cinta. Pero atención, ya que no debes cerrarla completamente o la cinta no tendrá espacio para deslizarse.
- Se rompió un listón de la persiana: esto se produce cuando están mayormente expuestas a cambios bruscos de temperatura, mucho calor, mucho frío, lluvia, viento o reciben granizos, por ejemplo. Lamentablemente, en este caso es necesario restituirlas.
Con estos sencillos consejos serás capaz de arreglar por ti mismo las cortinas o persianas con algunos defectos en tu hogar. Con rápidas soluciones podrás tener tu persiana nuevamente como la compraste.
Atrévete e intenta arreglar por ti mismo las cosas, ahorrarás dinero y, además, aprenderás cosas nuevas.