La desaparición de Tatiana Alejandra Hernández, una estudiante universitaria de 23 años, ha generado una creciente preocupación en Cartagena y sus alrededores, particularmente desde el pasado domingo 13 de abril de 2025, cuando se desvaneció sin dejar rastro. Su última aparición tuvo lugar cerca del Hospital Naval, donde estaba realizando sus prácticas en medicina. Según su padre, Carlos Hernández, las autoridades aún están investigando el caso, pero se siente frustrado por la falta de información que se les proporciona. “No tenemos mucha información. El CTI dice que están haciendo las pesquisas, que están recopilando información y todo eso”, comentó. La angustia y el desasosiego por el paradero de su hija aumentan con cada día que pasa sin noticias.
La preocupación por la falta de detalles sobre lo que sucedió con Tatiana se enmarca en una serie de circunstancias desalentadoras. Carlos Hernández expresó su descontento al lamentar que la cámara de seguridad que podría haber capturado imágenes de su hija al momento de desaparecer estaba dañada. «Una ciudad tan turística… esa parte yo creo que es muy clave para todo el turismo», dijo, enfatizando la importancia de mejorar la seguridad en áreas de alta concurrencia, especialmente en entornos donde jóvenes profesionales se encuentran realizando actividades académicas y laborales.
En un acto de desesperación y esperanza, la madre de Tatiana, en un intento por rescatar a su hija, organizó una marcha en Cartagena que busca no solo visibilizar el caso, sino también unir a la comunidad en la lucha por el bienestar de las mujeres en la ciudad. A pesar de la adversidad, ella mantiene una postura optimista, asegurando que «mi hija está viva». La movilización también sirve como recordatorio del compromiso colectivo que debe existir ante situaciones de desaparición, donde cada voz puede ser crucial para encontrar respuestas.
La autoridad local, representada por el alcalde de Cartagena, Dumek Turbay, se ha comprometido a intensificar los esfuerzos de búsqueda y ha anunciado un aumento significativo en la recompensa por información veraz que conduzca a la localización de Tatiana, ascendente a 200 millones de pesos. «Queremos saber si ella está bajo su propia voluntad o si está obligada… eso es lo que estamos tratando de esclarecer», afirmó Turbay, indicando que su administración está trabajando de cerca con diversas fuerzas de seguridad para garantizar que la desaparición de Tatiana no quede sin respuesta.
Los esfuerzos de búsqueda continúan, coordinados por la Fiscalía General de la Nación, la Policía Metropolitana de Cartagena y la Armada Nacional, quienes están dedicados a rastrear cada pista que pueda brindar información sobre el paradero de Tatiana. Sin embargo, la incertidumbre persiste entre familiares y amigos, quienes solicitan la colaboración de la ciudadanía, instando a cualquier persona que pueda tener información sobre su paradero a ponerse en contacto con las autoridades. La comunidad de Cartagena se mantiene alerta y unida en esta, la angustiante búsqueda de una joven a la que todos anhelan devolver a casa.