Santo Domingo, 16 de abril (Prensa Latina) — La Dirección General de Migración (DGM) de la República Dominicana ha deportado a 14,874 ciudadanos haitianos que se encontraban en condición migratoria irregular durante los primeros doce días de abril. Esta acción es parte de la intensificación de operativos de interdicción, impulsada por la implementación de un nuevo contingente de 160 agentes de acción rápida, quienes han sido capacitados para fortalecer el control migratorio en la nación caribeña.
Los números de deportaciones han aumentado significativamente, con un total de 176 operaciones realizadas por las brigadas de la DGM. El foco de estas actividades ha sido la provincia de La Altagracia, particularmente en las localidades de Higüey, donde se han detenido a 2,327 haitianos. Esta ola de detenciones responde a una política más rigurosa del gobierno dominicano, que busca hacer frente a la creciente presión migratoria y a los desafíos que la situación en Haití está generando en el país.
La DGM ha enfatizado su compromiso de mantener la firmeza en su política migratoria, alegando que su objetivo es salvaguardar el orden público, la seguridad ciudadana y la soberanía nacional. Con el contexto actual de crisis en Haití, donde la violencia y la pobreza han aumentado, la República Dominicana se encuentra en una situación delicada que exige medidas drásticas para controlar la entrada de migrantes.
En octubre de 2022, el presidente Luis Abinader había anunciado un plan para repatriar hasta 10,000 inmigrantes ilegales semanalmente, un esfuerzo por reducir lo que se considera un exceso de población migrante en las comunidades dominicanas. Abinader ha resaltado cómo la inestabilidad en Haití crea un gran impacto en los recursos del país vecino, poniendo como ejemplo la carga que representa la atención médica de los haitianos en el sistema de salud dominicano.
Este esfuerzo se enmarca dentro de un contexto más amplio de crisis generalizada en Haití, un país que enfrenta problemas de violencia pandillera y condiciones de vida críticas. Con cerca de 148,000 menores haitianos inscritos en las escuelas dominicanas, la presión sobre el sistema educativo y social es notoria. Las autoridades dominicanas están bajo creciente escrutinio internacional y local respecto a la gestión de la migración y cómo abordar los desafíos humanitarios que esto conlleva.