El reciente anuncio del gobierno de Estados Unidos sobre la exclusión de teléfonos celulares, computadores y otros dispositivos electrónicos de los nuevos aranceles ha traído un alivio significativo tanto para los consumidores como para las empresas.Esta medida se produce en el marco de la intensificada guerra comercial con China, donde se habían impuesto aranceles elevados que impactaban de lleno en los precios de los productos tecnológicos.