La primera cumbre del grupo BRICS desde su ampliación a once miembros se inauguró este domingo en Río de Janeiro, en un ambiente marcado por la creciente tensión internacional.El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, tomó la palabra para instar a los líderes presentes a no permanecer indiferentes ante lo que calificó como un "genocidio" en Gaza, haciendo referencia a la situación crítica en Oriente Medio.