La ciudad de Camagüey se ha convertido en el escenario de un importante encuentro cultural en Cuba, el Colóquio Nacional «Orgullo de Ser Cubano», cuyo objetivo principal es reafirmar la identidad nacional y promover la rica herencia cultural de la isla. Este evento, que tiene lugar en el Salón de Convenciones Santa Cecilia, reúne a destacados artistas, intelectuales y gestores culturales, quienes intercambian ideas sobre los desafíos que enfrenta la cultura cubana en un contexto globalizado y sometido a procesos de colonización cultural. Los participantes reconocen la necesidad de proteger y valorar las raíces autóctonas como herramienta esencial para la preservación del patrimonio nacional.
Kenny Ortigas, presidente de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba en Camagüey, ha calificado este coloquio como un «sueño hecho realidad», agradeciendo al gobierno por el apoyo a este tipo de iniciativas. Ortigas destaca que aunque se avanza hacia un ideal en la creación cultural, este proceso está cargado de incertidumbres. Subrayó que el evento no representa un rechazo a las influencias externas, sino que busca un renacimiento de expresiones artísticas como la danza y el ballet, lo que pone en relieve la rica diversidad cultural de la nación cubana.
Durante la inauguración, Armando Pérez, presidente de UNEAC en Camagüey, ofreció una conferencia titulada «Cultura e Identidad, Orgullo de Ser Cubano», donde enfatizó la importancia de proteger la cultura nacional frente a elementos que considera vulgares y antipatriotas. En un momento de reflexión, citó al reconocido cantautor argentino Fito Páez, señalando la evolución de las cuestiones estéticas en un mundo consumista, caracterizado por la devaluación de las experiencias del corazón y la esencia cultural de los pueblos.
En la sección teórica del coloquio, Freddy Núñez Estenoz, director del Teatro del Viento, valoró el papel transformador de la comunidad en la cultura, haciendo referencia al Grupo de Aficionados de Antillana de Acero, cuyas presentaciones son comparables a las de artistas profesionales. Asimismo, el panel titulado «Programación Cultural: Desafíos en el Contexto Actual», moderado por Yuris Norido, exploró cómo el arte puede influir positivamente en las mentalidades de las personas incluso en tiempos de escasez. Urcinio Rodríguez, presidente de UNEAC en Guantánamo, citó a Samuel Feijóo, quien defendía la idea de que el arte debe ser un símbolo de lucha y resistencia.
El coloquio también contempló una presentación inspiradora sobre la ética en la creación artística, a cargo de Eliel Gómez, presidente del Comité Provincial de Holguín. Este sábado, se anticipa una intervención de José Rodríguez, director de la Oficina del Historiador de Camagüey, quien abordará la importancia de la ciudad como un escenario esencial para la identidad y la nación. María Teresa Caballero, profesora de la Universidad de Camagüey, resaltó la crucial labor de difusión cultural en las comunidades como un medio transformador. La revitalización del movimiento de artistas aficionados se mencionó como fundamental para mantener la esencia nacional, mientras el coloquio reafirmó su compromiso inquebrantable de defender la identidad cubana en un tiempo en que la nación no puede permitirse perder su rumbo.