El Festival de San Remo ha alcanzado un nuevo hito en su historia con un récord de teleaudiencia que sorprendió a todos. En la penúltima noche del evento, el programa logró un impresionante 70,8% de share, la cifra más alta registrada en la era Auditel. Esto no solo marca un nuevo estándar para el festival, sino que también supera el récord anterior de la edición de Amadeus, que había llegado al 67,8% el año pasado. Este fenómeno de audiencia refleja no solo el atractivo del festival, sino también el interés renovado del público por la música italiana y por el espectáculo en general.
El momento culminante de la noche se produjo durante la actuación de Serena Brancale y Alessandra Amoroso, quienes interpretaron «If I Ain’t Got You» de Alicia Keys, atrayendo a 18 millones de espectadores a la pantalla. Este pico de audiencia destacó la capacidad del festival para reunir a grandes artistas y crear momentos inolvidables. Además, el anuncio de los ganadores de la velada, Giorgia y Annalisa con «Skyfall», también generó un gran impacto, alcanzando un share del 76,1%. Estos datos demuestran el poder de la música y cómo puede conectar emocionalmente con el público.
El éxito de la noche fue celebrado por los directivos de la RAI, quienes elogiaron el trabajo del presentador Carlo Conti y su equipo. Giampaolo Rossi, consejero delegado de la RAI, y Roberto Sergio, director general, destacaron cómo la calidad artística y musical de la velada contribuyó a estos índices de audiencia históricos. El regreso del querido actor y director Roberto Benigni al escenario de la RAI también fue un factor importante que atrajo a los espectadores, simbolizando el legado cultural que la RAI representa en la televisión italiana.
En la última noche del festival, la emoción continúa en el teatro Ariston, donde Carlo Conti estará acompañado por Alessia Marcuzzi y Alessandro Cattelan. Además, la modelo Bianca Balti regresará al escenario para entregar los premios, mientras que el artista Mahmood presentará un adelanto de su nuevo sencillo. La variedad de artistas y el formato dinámico del festival prometen mantener el interés del público hasta el final, cerrando con broche de oro esta edición del festival.
Carlo Conti, al reflexionar sobre su experiencia dirigiendo el festival, expresó su deseo de mantener la esencia del evento. “He intentado hacer un festival como los demás”, dijo, enfatizando que su enfoque ha sido siempre centrarse en la música. A pesar de los posibles imprevistos que pueden surgir, su objetivo ha sido claro: permitir que las canciones ocupen el lugar central. Con la atención del público firmemente capturada, el Festival de San Remo se reafirma como un evento crucial en el calendario cultural italiano, y esta edición en particular quedará grabada en la memoria colectiva de la teleaudiencia.