El ejército israelí anunció que retirará a miles de sus soldados de la Franja de Gaza, lo que podría indicar una reducción en los combates, especialmente en áreas del norte del enclave. Esta noticia llega antes de una visita programada del secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, a la región y en medio de presiones de Estados Unidos para que Israel reduzca la intensidad de su ofensiva.
A pesar de esta retirada, en algunas zonas de Gaza, como la ciudad sureña de Jan Yunis y en el centro del territorio, los enfrentamientos siguen siendo intensos. Israel ha prometido que la guerra continuará hasta lograr sus objetivos, incluyendo el desmantelamiento de Hamás, el grupo que ha gobernado la Franja durante 16 años.
El ejército israelí informó que cinco brigadas, o varios miles de soldados, saldrán de Gaza en las próximas semanas para entrenar y descansar. Sin embargo, el vocero del ejército, el contralmirante Daniel Hagari, no aclaró si la decisión implica una nueva fase en la guerra.
La ofensiva israelí en Gaza, desencadenada por un ataque de Hamás en octubre, ha dejado un saldo de más de 21.800 muertos, según el Ministerio de Salud de Gaza controlado por Hamás, que no diferencia entre víctimas civiles y combatientes. Israel sostiene que más de 8.000 combatientes han muerto, aunque no ha presentado pruebas que respalden esta afirmación.
El conflicto ha desplazado a alrededor del 85% de los 2,3 millones de habitantes de Gaza, lo que ha provocado oleadas de desplazados en busca de refugio. En Jan Yunis, ataques aéreos y bombardeos continúan, y tanto el ejército israelí como Yihad Islámica han informado de combates en la zona. El ejército israelí afirmó haber matado a un comandante regional de Hamás en un ataque aéreo en Deir al-Balah.
Con la retirada parcial de sus tropas, Israel parece estar reajustando su estrategia en el conflicto con Gaza, mientras la comunidad internacional observa con preocupación la situación humanitaria y de seguridad en la región.